martes, 17 de diciembre de 2013

José Augustín Goytisolo (Barcelona, España, 1928 –1999)




Una flor mustia




Ayer vino para decirle
que él siempre rompe lo que ama
que si toca una flor la mustia
que es peor que una cuchillada
que se ve que regresa y huye
como un galope de caballo
como un ruido de tempestad
como un olor de zorro en fuga.
Ayer vino para decirle
que sentía frío en el pecho
y que ya nunca volvería.
Ella no estaba y le dejó
una flor mustia ante la puerta.

lunes, 14 de octubre de 2013

ANACREONTE


Canosas están  mis sienes, blanca mi cabeza; ha huido de mí la juventud graciosa, están viejos mis dientes, y de la dulce vida me queda ya poco tiempo. Por eso lloro muchas veces, temeroso del Tártaro. Pues es terrible el abismo de Hades y dolorosa es la bajada hasta él: es bien cierto que el que baja no sube.


De nuevo amo y no amo, estoy loco y no estoy loco.

miércoles, 17 de julio de 2013

Valter Hugo Mãe (Angola, 1971)




El hueso del pipí
para eduardo pires

pensábamos que si nos partíamos el
hueso del pipí moriríamos en un instante sin
volver a crecer, sin casarnos
pensábamos que el hueso del pipí era
el más impresionante y que tal vez tuviera
coyunturas y que sería fundamental para crecer y para
casarse
pensábamos que haríamos hijos a
causa del hueso del pipí y que no los haríamos si
se nos partía ni creceríamos ni nos podríamos
casar
pensábamos que un día nos íbamos a casar, aterrorizados por
una infancia ansiosa, con las manos en el hueso del pipí para
protegerlo, razón por la cual también creíamos haber podido
crecer y casarnos
pensábamos que por el hueso del pipí valía la pena crecer y
casarse
no nos casamos, no nos partimos el hueso del pipí, crecimos,
debíamos haber muerto en la infancia, en un instante


martes, 2 de julio de 2013

Jan Erik Vold (Noruega)

 

 

 

La primavera del daltónico


Las estaciones
cambian. Todo estaba
blanco, ahora llueve y está gris, pronto
estará
verde, la gran instalación de bombeo
de las entrañas de la tierra trabaja
para juntar fuerzas
y soplar a
todos los árboles.

Matar focas —mancha
el hielo de sangre, rojo
sobre blanco.
Si dejan pasar a la televisión en color,
llega un alud de protestas.
Matar
seres humanos, rojo sobre negro —y la vida
se desangra desparrama
por las aceras. A la television no
la dejan entrar en Gorazde.

Los generales
están sentados
arriba en los cerros, con
los gemelos ante los ojos.

Dos amantes
corrieron
uno hacia el otro, como en un poema
de Jacques Prevert. No
llovía
aquel día, el amor
fue más fuerte que
la prudencia, la bala del francotirador
más fuerte que el amor, la
voluntad bélica
serbia
más fuerte que la voluntad
de paz de la ONU.

¿Para qué queremos
palomas si sólo se usan como diana?

 

domingo, 12 de mayo de 2013

Juan Manuel Roca (Colombia)





Oración al señor de la duda

Más que fe, dame un equipaje de dudas.
Ellas son mi puente, mi afluente, mi oleaje.
Venga a nos el Reino de lo Incierto.
Mantén en vilo mis verdades,
Concebidas, muertas y sepultadas
En los telares del olvido. Llévame
Por las arenas movedizas,
Dame a comer el plan de la derrota,
A beber el agua del silencio.
No hay timos ni trucajes:
Estoy herido y soy mi camillero.
Sean las certezas palacios de nieve
A los que alguien asedia con el fuego.
Señor de la duda, si existieras,
Escucha la oración del descreído.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Niels Hav (Dinamarca)






Epigrama



Te puedes pasar la vida entera
acompañado de palabras
sin encontrar
la justa
Igual que un pobre pez
envuelto en un diario húngaro:
primero, está muerto,
segundo, no entiende
húngaro!

viernes, 15 de marzo de 2013

Luis Vidales (Colombia)




Viaje con aventura


Ayer no más salió mi alma

-en viaje de recreo-

hacia sus países abstraídos.

Y ahora vuelve coja,

porque en mitad de la jornada

le sobrevino un ataque de reuma.

Como es lógico

le prohibí salir de casa.

Y en su aburrimiento

siento como se estira

y se encoge

la pobrecita.

domingo, 6 de enero de 2013

Eduardo Langagne (Ciudad de México, 21 de diciembre de 1952)







Piedras

no tenemos la casa todavía.
tenemos piedras; algunas.
trozos de pan, algo de vino tenemos
pero la casa no;
sin embargo tenemos oscuridad,
porque luz no tenemos todavía;
tenemos algunas lágrimas y besos.
otras cosas igualmente ridículas tenemos,
pero la casa no. quizá
paredes que se levantan muy despacio,
mas no tenemos casa todavía
donde encontrar el frío, la soledad,
la lluvia,
pero arriba,
un cielo como sábana tenemos
y abajo un infierno delicioso
por donde deambulamos
recogiendo piedras.
"hoy no me llevas, muerte, calavera,
no me voy, no quiero ir.
hoy no voy ni entrego mi barco de papel,
mi brazo, mi guitarra, hoy no,
hoy solamente tiro piedras,
poemas,
muchas piedras contra tu rostro
—no niego, dulce rostro—
tiro piedras,
me arranco el corazón y te lo arrojo.
hoy no, muerte, hoy no voy, no quiero,
necesito hacer la casa."
y estoy vivo
cuando arrojo palabras, muchas palabras.
fuego.