BENDICIÓN
Santa María, bendice a ese hombre
que ha logrado limpiar de mi piel
tantas caricias marchitas,
tantos cuerpos olvidados por el tiempo.
Bendícelo, por que ha logrado
que con una sola palabra
mis heridas sanen
y mis muertos descansen
en lo más recóndito del pasado.
Porque ha purificado mis labios con sus besos
y mi vientre con su semen.
Santa María, bendice a ese hombre
al que hoy llamo amante.
Santa María, bendice a ese hombre
que ha logrado limpiar de mi piel
tantas caricias marchitas,
tantos cuerpos olvidados por el tiempo.
Bendícelo, por que ha logrado
que con una sola palabra
mis heridas sanen
y mis muertos descansen
en lo más recóndito del pasado.
Porque ha purificado mis labios con sus besos
y mi vientre con su semen.
Santa María, bendice a ese hombre
al que hoy llamo amante.